Olivier Sabado y Olivier Besancenot han publicado ayer un artículo em el que rinden su homenaje a El Pelado.
“Nosotros le llamábamos «El Pelado». Se llamaba Mario Raúl Klachko. Hijo de judíos ucranianos emigrados a Argentina, nacido en 1945, el Pelado pertenece a esa generación de revolucionarios latinoamericanos que se comprometieron en cuerpo y alma en los años 60 por el advenimiento de un mundo mejor, más igualitario y más humano. Entusiasta de la revolución cubana y de los llamamientos internacionalistas del Che Guevara, visceralmente resistente al estalinismo, se incorporó a las filas del PRT-el Combatiente y del ERP-Ejército Revolucionario del Pueblo, junto al revolucionario y guerrillero argentino Mario Roberto Santucho. Cuando el PRT toma un camino verticalista y excluye a los trotskistas de la IV Internacional, Pelado formas la fracción roja del PRT-ERP, de la que es uno de los dirigentes.
El Pelado lucha contra la dictadura militar argentina. Participó activamente en la resistencia política y tomó las armas, multiplicando los golpes contra el régimen: organización y protección armada de las huelgas, «expropiación» de los bancos, ataques a las cárceles, secuestro de los grandes patrones. Convertido en un hombre a batir y en el enemigo público número uno de su país, Mario tuvo que exiliarse en París, donde sus camaradas de la Liga Comunista le acogieron. Sin renunciar nunca a la perspectiva revolucionaria, revisa críticamente esta epopeya de la lucha armada. Continúa esta evaluación estratégica y su cuestionamiento durante los años 80, tras un breve regreso a Argentina, en diálogo con Nahuel Moreno y Hugo Blanco, revolucionarios marxistas argentinos y peruanos.
En Francia, el Pelado retomó su formación como arquitecto convirtiéndose en urbanista. Sigue de cerca la actualidad social y política y participa regularmente en las actividades militantes y políticas de la Liga Comunista. En particular, ayuda a sus compañeros a entender el levantamiento revolucionario de 2001-2002 que hizo arder a Argentina. En cuanto puede, participa en movilizaciones sociales y políticas, como la «Nuit debout» (Noche en pie) de 2016, en su municipio de Pantin”.Sus problemas de salud se multiplican y los intercambios son cada vez más escasos. El Pelado sigue y seguirá siendo un referente: el de un militante revolucionario que luchó y arriesgó su vida por sus convicciones, en la Argentina de los años 70, sin hundirse nunca en la ceguera y los impases sectarios. En una entrevista concedida a la revista argentina Página 12 el 12 de marzo de 2018, en la que el periodista le pide que se defina, responde: «Históricamente trotskista»
Con él, es una parte de nuestra historia que también se va. Estamos pensando en su familia y amigos. También a sus compañeros, los argentinos, los vascos y los de todo el mundo. Y estamos orgullosos de estar entre ellos
Conocí al pelado em los que se transformo para mi en un encuentro histórico. Un año y meses antes, mi hermano Luis Pujals militante trotskysta como El Pelado había sido secuestrado. Dias antes en el último encuentro que tuvimos me había hablado de la necesidad de defender la IV Internacional contra el castrismo verticalista al cual apuntaba Santucho.
El encuentro históricon com “El Pelado fue en el acto que nosotros del PST (Partido Socialista de los Trabajadores) hicimos en la Federación de Box a fines de 1972. Se trataba del primer acto publico de un partido revolucionario realizado cuando la dictadura de Lanusse estab a em su fin y había decidido la apertura electoral como consecuencia del Cordobazo, una insurrección obrera em la ciudad de Córdoba.
A la mitad del acto nos avisan a quienes estábamos en la organización que hay un grupo de militantes armados del ERP Rojo que quieren venir a saludar al acto. No dudamos ni un minuto em hacerlos pasar; solo les pedimos que dejen las armas con nuestra guardia de orden en la entrada del acto. Ahi aparece em primera fila “El Pelado” para traer su solidaridad de trotskista” Creo que no usó de la palabra, (no era táctico) pero su presencia quedó marcada como el gesto histórico de reconocimientro entre fracciones trotkistas enfrentadas en la IV.
Nos recencontramos em 1980 em Argentina y Paris. Quedamos compañeros y amigos. Él se transformó en un gran apoyador internacional del MAS de Argentina. Se enojó conmigo cuando ocurrió la inevitable ruptura del partido en 1992.. No lo vi más. La historia ahora em forma trágica nos ha recuperado y puesto exactamente del mismo lado; Como dicen Sábado y Besancenot un exponente -de los mejores-, de essa juventud sesentista que abrazó la causa de la revolución y la lucha armada sin bajar las banderas del trotkismo.